Influencias en el Instituto Potosino de Bellas Artes en la década de 1960

Gamboa, el pilar más sólido del IPBA
Con fines de enseñanza y creación artística, sobre todo en pintura; después de una significativa trayectoria cerca de artistas como Diego Rivera, Rufino Tamayo, entre otros; el meridano Raúl Gamboa Cantón llegó a San Luis Potosí en 1960 (Gámez, 2010), en dónde fue director del IPBA en 1963, llevó a cabo un nuevo programa de enseñanza, y laboró hasta 1996, considerado así “el pilar más sólido” (Gámez, 2010), el gestor de la “edad de oro del IPBA” (Gámez, 2010), y sobre lo que el embajador cultural de México, Miguel Álvarez Acosta, expresó: “Creo que esto será el semillero donde San Luis recobre su antiguo prestigio de Cultura” (Gámez, 2010).

Tendencias de la pintura en la Ciudad de México adquiridas por Gamboa
Consigo, Gamboa trajo de su escolarización artística, influencias nacionalistas propias de los artistas e intelectuales de la época, aunque, en cierta medida, algunos – como Gamboa – no tardaron en diferir de aquellos ideales originaria y radicalmente socialistas y comunistas que dieron lugar a dicho nacionalismo.

Tendencias de la pintura en el mundo adquiridas en México
En relación con las artes plásticas, a México también llegaron diversas tendencias como el Neoexpresionismo, el Nuevo Humanismo, el Informalismo, el Abstraccionismo Geométrico, entre otras (Gámez, 2010). Empezó a ser importante la expresión de individualidades basadas en los conceptos del vocabulario internacional que adaptaron como oposición al “gastado vocabulario del arte de mensaje implícito en el realismo social” (Gámez, 2010), que negaban con pensamientos y palabras como las de José Luis Cuevas: «México se encontraba encerrado no en una cortina de humo o de hierro, sino en “La cortina del nopal”» (Gámez, 2010), pues pasaron tantos años sin soltar aquel estilo que se tornó folclorista.

La misión de Gamboa con los estudiantes del IPBA
Gamboa tenía un gran interés por estimular la creación plástica en América. Desde sus inicios en la dirección del IPBA, puso en práctica un nuevo método de enseñanza con el objetivo de dar opciones para no perpetuar el sometimiento del talento bajo los caprichos ajenos de poderes religiosos, económicos, políticos u otros. Un programa pedagógico que – si bien incluía orientación, proposiciones, consideraciones del pasado para sopesar sus efectos, y enseñanzas técnicas iniciales u opcionales – se basó en las estrategias educativas paradigmáticas centradas en descubrir la propia personalidad, en provocar en el estudiante su rebeldía, su creatividad libre de supuestos, “verdades únicas”, tradiciones académicas e imposiciones de cualquier procedencia.

Estrategias que en ese momento estaban surgiendo en el país – tal como se dejan ver sus rastros en el texto que recuerda Moisés Gámez sobre “Los Hartistas” de Mathías Goeritz: «Estamos hartos de la pretenciosa imposición de la lógica y de la razón del funcionalismo, [...] de la moda del momento [...] Tratamos de empezar otra vez desde abajo, en un sentido sociológico espiritual [...] intentar que la obra del hombre se convierta en una oración» –, y que, junto con su contexto histórico – en el que, como menciona Gámez, fue significativo: los asesinatos de líderes como John F. Kennedy o Martin Luther King, la invasión en Vietnam, el movimiento hippie, la llegada del hombre a la luna – si es que llegó –, entre otros acontecimientos (El Instituto Potosino de Bellas Artes 1955-2005, 2010) – no sólo posicionaron al IPBA como una escuela de artes plásticas activa y participativa que figuraba a nivel nacional, sino que impulsaron la conciencia crítica, el interés por conocer cuanto sea posible sobre la historia, la superación creativa, e influyeron en las inquietudes y expresiones artísticas de los estudiantes.

Al margen de esta misión afín con su generosidad y vocación docente, Gamboa no se afanó en promover sus tendencias personales por el realismo mágico, el realismo figurativo, el surrealismo (Gámez, 2010), tampoco normalizó una iniciación en el retrato neorrealista de acuerdo con su experiencia, ni sobrepuso la síntesis entre la expresión moderna y el sentimentalismo regional como su regionalismo peninsular o su apreciación por lo mágico de lo cotidiano del pueblo maya (Palau, 2012). No lo hizo, pues tenía en claro que – tal como Palau recuerda la expresión de Fausto Castillo: – «... dejarse encasillar en una temática y en el estilo de un pintor, por grande que sea, es hacer donación de nuestra libertad» (Raúl Gamboa Cantón, el pintor, el maestro, 2012). Sin embargo, difundió la tendencia al desprendimiento de lo reglamentado en el arte.

Efectos de la enseñanza metodológica introducida con Gamboa
A consecuencia de ello, se pudieron apreciar entre los alumnos una variedad de tendencias como algunas ya mencionadas: las abstractas, impresionistas, superrealistas, de escuela figurativa, expresionistas, neoexpresionistas, posromanticistas, geométricas, entre otras.
  
En la década de los setenta, señala Gámez que la característica de los Institutos regionales era un estudiantado con extrema diversidad de edades, cultura, posición socioeconómica, horarios, integraba estudiantes, amas de casa, profesionales, obreros, entre otros con los que se experimentaba trabajar, como aclara Gámez, la alteración del orden jerárquico de los valores, ponderando así la espontaneidad sobre la exactitud. Estudiantes en los que había un «profundo interés por el estudio y las expresiones artísticas por parte de estratos sociales con limitados recursos económicos» (El Instituto Potosino de Bellas Artes 1955-2005, 2010).

Maestro de Artes Plásticas

Raúl Gamboa

Estudiantes que iniciaron en el IPBA en la década de 1960:

María Teresa Palau
 Carmen Alvarado
 Celia Remírez
 Álvaro Muñoz de la Peña
 Obdulio Sergio Portillo
Alberto Martínez
Víctor González
 Emma Ortiz
Jorge Noriega
 Antonio Chessal
 Baltasar Saiz
 Juan Borrás
 Melania Manteca
 Mercedes Robles
 Silvia Puyou
 Carmen R. de Martens
 María Teresa Garza
 Óscar Martínez
 Fernando González


Obra del maestro Raúl Gamboa

Autor: Raúl Gamboa
Título: La empestad
Técnica: Mixta. Óleo sobre fibracel
Fecha: mayo de 1969
Medidas: 70x83.5
Col.: Carmen Alvarado

Referencias:
Gámez, M. (2010). El instituto potosino de Bellas Artes 1955-2005. México.

Palau, T. (2012). Raul Gamboa Cantón, el pintor, el maestro. (B. O. Pereda Duarte, Ed.) San Luis Potosí, México: Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

Estudiantes que exponen:
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